Viajar y amar. Lugares comunes del cine independiente


El 17º Festival de Cine Independiente de L’Alternativa de Barcelona nos ha dejado el buen sabor de un relámpago vivo y ardiente. El éxito de público y la tremenda participación de ésta edición hablan ya de la consolidación del saludable proyecto que dirigen Margarita Maguregui, Tess Renaudo, Cristina Riera y Marc Vaíllo.

Las películas ganadoras de éste año, Viajo porque preciso, volto porque te amo (Brasil) y Glubnika 35x45 (Rusia), destacan un tipo de cine implicado entre las fronteras del documental y la ficción e inquieto por las contaminaciones de contenido y de forma.

El viaje, argumento inmemorial, ha sido el lugar común en el encuentro de las piezas premiadas por el Jurado. Su protagonista, el hombre-cámara. El personaje que, desde Dziga Vertov, ha poblado momentos de la historia del cine menos adocentado bajo epígrafes como la Nouvelle Vague francesa o el documental europeo contemporáneo.





Los autores vencedores, Marcelo Gomez, Karim Ainöuz y Evgeny Solomin han hecho presente tanto en ficción como en documental la importancia de la mirada del viajante que, sin destino, construye un camino a través de las imágenes que van tomando vida ante su cámara. En el caso de Viajo porque preciso, volto porque te amo, éstas son los iconos del desarraigo que surgen en un viaje por el noroeste de Brasil, rostros, voces, llanuras y vínculos que recuerdan al errante operador la importancia irremediable de un antiguo amor. En Glubinka 35x45, el fotógrafo encuentra en los rostros anónimos de lugares aislados de su país la brecha histórica en la que la antigua Unión Soviética y la Rusia moderna se yuxtaponen de un modo tan hiriente como poético.


La nostalgia hacia antiguas formas de representación de la imagen, como el super8, la estética Lomo o la fotografía analógica en blanco y negro, hacen todo lo demás: conectar con la intimidad de la mirada del hombre-cámara desde la estética del recuerdo, y transportar al espectador a un estadio de goce y reciclaje de la percepción audiovisual.


Mientras el cine que circula en las salas y en la legalidad de la distribución se preocupa por la crisis y aprovecha para hacerla extensiva al género y a las autorías, el cine independiente emerge desde el mejor rincón posible, desde los lugares comunes más prolíficos para contribuir a una valiente y grata renovación de la mirada. Éste cine no tiene padrinos, pero gracias a iniciativas como L’Alternativa, está empezando a tener muchos espectadores.

Comentarios

  1. Felicitaciones por el post, muy interesante y completo. El blog es muy ameno de leer.
    Saludos de Oz, desde:
    http://cinemarcial.blogspot.com/

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