La fuerza de las grandes distribuidoras... norteamericanas

Escribe Robert Langdon

El pez grande se come al chico. Siempre lo grande avasalla y se impone a lo pequeño. Da igual que sea en el agua, en el aire o en la tierra, en la vida o en el cine. Ocurre con las grandes productoras cinematográficas que imponen sus condiciones a las pequeñas y también a las cadenas de exhibición. Enorme es la presión que ejercen las productoras norteamericanas cuando ofertan una película que saben va a devorar a cualquiera que se ponga en su camino. Ante ello las diferentes exhibidoras, incapaces de competir con títulos potentes, deciden quedarse varados hasta que la marejada amaine.

Si no se entiende tal planteamiento, recomiendo darse una vuelta por los estrenos de la semana correspondiente a la mitad de mayo. ¿No se nota algo raro en esos datos? Quizás huela demasiado, de forma alternativa, a incienso y azufre. Ante tal efluvio oloroso cualquier sensata película que tuviera previsto estrenarse el viernes 15 de mayo de 2009, habría optado por retirarse, para evitar ser contaminada y a la espera de mejores tiempos.

Otra de ángeles y demonios
En la semana del 15 al 22 de mayo ha habido casi total carencia de estrenos, cuando lo normal es que se hubieran estrenado entre ocho y diez. En el listado no caído pocos e insignificantes títulos animosos en salir a competir debido a que ninguno podrá enfrentase a la pegada (comercial) arrasadora de Ángeles y demonios, filme dispuesto, incluso, a subirse a las barbas al anterior de Brown-Howard. Dato curiosa, la novela Ángeles y demonios fue escrita con anterioridad a El código Da Vinci pero se publicó después. Como la película aunque en éste caso la primera parte aparece como continuación de la anterior aventura.

Al anunciarse con mucho tiempo de antelación el estreno de este viperino título, los distribuidores, para evitar diabólicos problemas, decidieron sentarse para contar las ganancias ajenas o las (propias) obtenidas hasta ese momento. A tal gran complot a favor del filme de Ron Howard, han contribuido con publicidad gratuita a) la Iglesia Católica, siempre tan eficiente, certera e infalible, impidiendo, primero, que se rodase planos en alguna de sus sacrosantas Iglesias y luego anatematizando su estreno b) diversos grupos ultra religiosos y fanáticos, floridos exponentes de un catolicismo de ultratumba. Ni unos, ni otros, aún parecen haberse enterado de que el mayor desprecio está en el silencio. Pues no, (por cierto el muy mecánico filme no hace temblar ninguna piedra vaticana), después de dos siglos de existencia (sólo dos) de batallar y de imponer sin la dulzura y el talante que se le supone, la Iglesia, considerada (por si misma) única y verdadera, aún no ha aprendido la lección.

Al menos, eso si, los inquisidores cinematográficos ya, por fortuna, hace tiempo que no nos impiden ver aquellos títulos que presumían dañarían nuestras puras mentes. Posteriormente a esa imposición salvadora, y al ver que sus desvelos prohibitivos eran ya inútiles siguieron otra estrategia: promover cadenas de rezos delante de los cines donde se proyectaban películas no recomendables. De esa manera pedían por la salvación eterna de los pobres humanos seducidos por el averno de la sala de proyección, También, aquellos protectores, solían introducir sus malos olores en la sala para ejemplarizar el olor de los diablos que nos tenía encadenado a la butaca. Actualmente siguen insistiendo en que nos cuidemos, en que no nos hagamos casos de herejes tales y evitemos el influjo de las imágenes pecadoras. Total, su insistencia, cantada a los medios de comunicación, supone una maravillosa propaganda añadida a la pagada por los comerciantes del espectáculo fílmico, para que los espectadores se agolpen en los cines donde se proyecte el pecaminoso y prohibitivo filme. Basta que algo se intente prohibir para que resulte apeteciblemente seductor.

ver trailer de `Gran Torino´
Sin ningún competidor a la vista, Ángeles y demonios está dispuesta a convertirse en el filme que más dinero haya recaudado…en la primera semana de exhibición. Con todo, sorprende la pasividad de los exhibidores y distribuidores que dejan franco el camino al goloso filme. Antes de tomar esa (¿sabia?) decisión deberían haber recapacitado sobre algunos curiosos hechos ocurridos (en cuanto a estrenos de películas) en semanas anteriores. Citaré dos: a) El excelente Gran Torino (leer crítica)de Eastwood, filme de escaso presupuesto y de poco impacto mediático, se situó durante varias semanas en el primer lugar del ranking de estrenos, y hoy, a varias semanas (diez ya) del estreno aún se mantiene en el listado de las películas más taquilleras de la semana, concretamente ahora se encuentra en el lugar doce siendo su recaudación total superior a los 13 millones de euros b) la semana pasada la superespectacular Star Trek (leer crítica)sólo pudo obtener un honroso tercer puesto en el ranking con un montante de poco más de un millón de euros, siendo rebasada tanto por (y en ese orden ascendente) X-men, origenes, Lobezno (más de millón y medio recaudado en la semana, seis en total) y (la gran sorpresa) Hannah Montana, la película (casi tres millones de euros en una semana). Puesto obtenido gracias a los infantes por su influencia televisiva.

`Hannah Montana´, otro producto de la factoría Disney

En la misma semana, en el ranking USA, Hannah Montana, la película (cinco semanas desde su estreno) se clasifica en el décimo lugar con una recaudación total (es decir desde su estreno) de cincuenta y cinco millones de euros, mientras que el segundo puesto es para (igual que en España) X-.Men, orígenes, Lobezno (2 semanas de exhibición y 97 millones de euros totales recibidos). El indiscutible primer puesto es (a diferencia de lo que ha ocurrido entre nosotros) para Star Trek que en su primera semana de estreno ha recaudado más que Hannah Montana en sus diez semanas de exhibición. Nada menos que unos cincuenta y siete millones de euros. Es de esperar que Ángeles y demonios pulverice todas esas cifras. Al tiempo.


Comentarios

  1. Pues Star Trek a pesar de los pesares no está tan mal como se presumía, y algunos dicen. Lo que no se entiende es como la insoportable Hanna ha conseguido vencer a la Enterprise... en España. Hay tantao nino y niña encantados con la pizpireta Hanna? Pero la Enterprise remontará el vuelo si los ángeles y los demonios se lo permiten. Y se alían con curias terrestres no te digo... te cuento.
    Cain.

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  2. Es mucho mejor ver cabalgando a una rubia pizpiereta que a los amigos de un tipo de orejas puntiaguda haciendo la fiesta del pijama.
    Robert GumpDon y sus angeles, hacen que se me lleven los demonios.
    Bucefalo

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  3. No hay que esperar demasiado del señor Howard y sus demonios, pero dede luego, con todo, serán menos intragables que las tonterias de la señorita Montana.
    Con orejas puntiagudas o sin ellas la película de Star Trek, a su vez, es un espectáculo divertido
    Hupert

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  4. El primo de Hanna19 de mayo de 2009, 20:07

    Lo de Hanna Montana tiene que ver con el marketing televisivo brutal que se impone en la televisión y que llega todos los días por el canal Disney. Es la serie, son los cds y todo el merchandising.

    Star Treck tiene sus fans (y muy consolidados) en España pero no alcanza al fenómeno americano. Y hay que reconocer que la serie llega ya muy desgastada (las últimas películas no son demasiado atractivas).

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  5. Lo esperado: Ángeles y demonios, sin nadie que le haga sombra, arrasa en taquilla. El filme, se dice bien, ha recaudado mas de cinco millones de euros en su primer fin de semana en la cartelera española.
    No es nada del otro munmdo, pero resulta más divertida (la película) que El código de marras.
    Quinlan

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