The Walking Dead (III)

Episodios 5 y 6

Los dos episodios finales confirman las impresiones que hemos ido extrayendo de la visión de The Walking dead. La serie, desprovista ya del marketing publicitario que la proclamaba como excepcional, se nos muestra despojada de abalorios artificiales, revelándose como un producto con un resultado final más bien pobre.

Es verdad que The walking dead tiene un diseño de producción de altura, atractivos movientos de cámara, con esa obsesión por las tomas cenitales y los pequeños detalles (el collar, el anillo, la llave) que ya hemos comentado. La tensión en las escenas, de manera aislada, está bien resuelta, pero el problema surge del análisis general, es decir, cuando se valora no una escena concreta sino el conjunto, pues es ahí donde la serie frena las espectativas iniciales. Gran parte de este fracaso viene por una estructura repetitiva (ciclíca) que hace que no se avance.

The Walking Dead

En los episodios 5 y 6 volvemos a tener el elemento innovador, en este caso, el refugio científico, para después volver al mismo punto de partida, lo que hace que la narración quede estancada. Parecía que tras el sangriento desenlace del episodio 4, la llegada a ese refugio y la aparición de ese personaje solitario que bajo el control de un ordenador (el recuerdo de 2001 es inevitable) se convierte en una especie de dios, debía aportar un giro a los acontecimientos. Sin embargo, como otras tantas veces (las idas y venidas a la ciudad), el momento filosófico del encierro donde surgen los interrogantes verdaderos (la inevitable muerte, el sentido de la vida), todo se termina diluyendo para acabar con una rutinaria salida bajo la presión de la cuenta atrás que implica la destrucción de toda la vida.

Personajes que aparecen y desaparecen sin demasiado sentido o explicación razonable y el inevitable final que devuelve a los personajes a la misma situación, es decir, un puñado de sobrevientes que luchan en un mundo adverso, no nos hace ser demasiado optimistas para la continuación de la serie.

The Walking Dead

Producto televisivo, avanzado en la mostración de la violencia y conservador en el discurso con algunos aspectos realmente molestos y que ya hemos comentado en anteriores post y que podemos resumir en la necesidad del orden establecido (la obsesión por el uniforme del personaje principal), la sumisión de los personajes femeninos y el carácter primordial de la familia frente a otro tipo de agrupaciones. Quizá lo más decepcionante sea también el buen comienzo del primer episodio al que sigue una rutinaria continuación.

En fin, que ellos se lo coman, metafóricamente hablando, claro.


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Comentarios

  1. Personalmente si creo que es una buena seria, ASUSTA, que es de lo que se trata.

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  2. En algunos de los post se ha comentado que la serie se sigue bien. Efectivamente, asusta. Tiene además buen uso del sonido como efecto intimidador. Mi opinión negativa se fundamenta en que, primero, la serie no logra superar el primer episodio, y segundo, que la narración general que sustenta la historia no interesa demasiado, muchos cabos sueltos como todos los personajes que vienen y van sin justificación.

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  3. La serie decae conforme se aleja del comic. Solo el primer capítulo se ciñe a los acontecimientos sucedidos en las viñetas.
    A modo de curiosidad, el tercero está escrito por Kirkman (guionista del comic) y aporta la interesante visita a una residencia de ancianos (idea nunca plasmada en el comic).
    The walking dead defrauda bastante. Os recomiendo la lectura de los comics, que en España actualmente va por el tomo numero 12.
    Y si queréis zombis: Dead set. Miniserie británica (ya editada en DVD a modo de película de algo más de dos horas) que aúna muertos vivientes y gran hermano. Excelente.

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